Por qué nuestra PROTEÍNA ES MEJOR

DESMITIFICAR LAS PROTEÍNAS Y VOLVER A LO ESENCIAL

En primer lugar, ¿de qué se habla exactamente cuando se habla de proteínas? Ofrecemos un pequeño recordatorio para comprender mejor su origen y su función: después de haber sido ingeridas y digeridas más tarde, las proteínas se transforman en aminoácidos. Estos aminoácidos no son sintetizados por el organismo, sin embargo, son indispensables para nuestra supervivencia. Por eso, una alimentación equilibrada es crucial. Aporta a nuestro organismo la cantidad de proteínas animales o vegetales que necesita.

 

Las proteínas constituyen los ladrillos que van a construir los elementos del músculo. Los culturistas, los deportistas, y todos aquellos que cuidan su forma física saben que necesitan proteínas para desarrollar y mantener su musculatura. Por ello utilizan frecuentemente complementos proteínicos en su alimentación. ¿Este proceso debe respetar ciertas reglas ? Sí. De manera ideal, la cantidad de complementos en proteínas no debe sobrepasar más de la tercera parte de las aportaciones nutritivas diarias.

Hemos visto la cuestión de la cantidad. Recordemos ahora la de la calidad. Las fuentes de proteínas son numerosas, en efecto, pero no todas son iguales en calidad. Por ejemplo, la proteína surgida del suero de la vaca es una de las mejores proteínas que hay. Para obtenerla, se separa de la leche el suero denominado lactoserum. Después, este suero es micro-filtrado para preservar las proteínas que serán secadas convirtiéndose en polvo fino.

Cuanto más importante sea la concentración de proteínas, mayor será la calidad del complemento proteínico. Así, para nuestra gama de proteínas ABS, hemos optimizado el proceso con el fin de que las proteínas estén presentes en una concentración óptima. Un proceso que muchas empresas industriales no siguen con suficiente precaución. Muchas de ellas escogen incorporar aditivos a su mezcla. Una "artimaña" que les permite reducir la cantidad de proteínas presentes en un envase.

Todas las proteínas no son equivalentes y ¡todas las mezclas proteínicas no tienen tampoco la misma calidad! Detallemos un poco qué se puede encontrar en estas mezclas...

LOS EDULCORANTES: DESPUÉS DEL DULZOR, EL AMARGOR

Sucralosa, aspartamo, acesulfamo de potasio, sacarina… todos estos nombres un poco raros designan a los edulcorantes de síntesis que están prohibidos en su mayoría en numerosos países o están ya en el punto de mira de las autoridades sanitarias. En efecto, numerosos estudios científicos han demostrado sin lugar a dudas la peligrosidad de estas sustancias edulcorantes. Su consumo está vivamente desaconsejado para los niños y para las mujeres embarazadas. Un buen motivo también para que los adultos en su conjunto eviten consumirlos.

Consciente de estos peligros, ABS no utiliza ningún edulcorante de síntesis en estas mezclas proteínicas. Sólo un extracto de Stevia, edulcorante natural que se extrae de las hojas de la Stevia Rebaudania, se incorpora en cantidades muy pequeñas a nuestros productos.

AROMA NATURAL: NO TAN NATURAL COMO PARECE

¿Usted quizás forma parte de las personas que piensan que un aroma a fresa natural proviene directamente de la fruta así denominada? Desengáñese, el aroma de fresa surge de virutas de madera mezcladas con otros ingredientes cocidos y fermentados con el fin de obtener un sabor a fresa que se aproxime al original. Al ser la madera un ingrediente natural, el aroma que se desprende de la misma es considerado por tanto con toda legalidad como que él mismo es un aroma natural. Éste es un ejemplo entre otros.

Asimismo, al contrario de lo que dicen los fabricantes, estos aromas denominados "naturales" no están desprovistos de riesgo para la salud: comer fresas o comer madera cocida y fermentada no es la misma cosa. Si su paladar se deja engañar, su organismo sí ve la diferencia. Natural, sí. Auténtico, no.

En ABS sencillamente no utilizamos ningún aroma, ya sea natural o de síntesis. Sólo el cacao desgrasado y reducido en polvo o incluso las vainas de vainilla verdadera, empleados con generosidad, darán el sabor de nuestros productos.

ADITIVOS: EL GRAN BAZAR

Comencemos por recordar para qué sirven los aditivos. Las empresas industriales los utilizan generalmente para mejorar la textura, embellecer el aspecto, optimizar la conservación o incluso facilitar el envasado. Sin embargo, pensémoslo: ¿Son realmente indispensables? ¿Es verdaderamente tan crucial cambiar la textura, el color o el aspecto de un producto ? Muy a menudo, los fabricantes abusan de su utilización.

Tomemos el ejemplo de los espesantes. Algunos son totalmente inofensivos, como la goma Guar E412, surgida del grano de una leguminosa, o la goma de Algarroba E410, que se obtiene a partir de la vaina del algarrobo. También es el caso de los alginatos obtenidos a partir de las algas. Todos estos aditivos espesantes no tienen peligro, pero algunos fabricantes hacen un uso desproporcionado de los mismos para llegar al final a sopas espesadas de manera tosca.

En cambio, otros espesantes son mucho más peligrosos. Su utilización debería incluso estar prohibida en cualquier producto nutritivo. Es el caso de la goma Xantana E415, utilizada en su origen por la industria cosmética para espesar las emulsiones y formar los geles. Surgida de un polisacárido natural, producido por la fermentación a partir de la bacteria Xanthomonas Campestris, este componente es tolerado en cosmética pero no tiene absolutamente ningún lugar en la industria alimentaria. A semejanza de este aditivo peligroso, numerosos espesantes son utilizados a veces para mejorar rápidamente una textura con completo perjuicio de la seguridad alimentaria.

Para toda nuestra gama de productos ABS hemos querido, por lo tanto, utilizar los aditivos con parquedad y hemos seleccionado los aditivos que presentan las mejores cualidades alimentarias. De este modo, encontrará en nuestros productos la goma Guar, empleada en pequeñas dosis. Del resto, hemos prohibido los conservantes, los colorantes, y todos aquellos aditivos artificiales o naturales sin interés. Ningún aroma superfluo en nuestros productos, sólo el cacao bien dosificado, confiere un gusto agradable a la mezcla proteínica ABS. Y para mejorar los resultados durante el ejercicio físico previniendo la aparición de radicales libres, en lugar de un aditivo antioxidante, utilizamos únicamente el extracto de haba de cacao.

OGM: ORGANISMOS GENÉTICAMENTE MALSANOS

Si algunos lo dudaban todavía, la incidencia nefasta de los OGM sobre la salud se confirma sin ambigüedad. Así, un estudio reciente del biólogo francés Gilles-Eric Séralini, catedrático de biología molecular en la universidad de Caen, ha sido publicado en la revista Food and Chemical Toxicology muestra las graves consecuencias que puede presentar el consumo de OGM para un ser humano. En Francia y en numerosos países, el cultivo de OGM está prohibido. No podemos más que felicitarnos por este hecho. Sin embargo, existe otro problema con los OGM, a saber, que su consumo puede ser indirecto. Por ejemplo, se puede consumir un animal que haya sido alimentado con maíz transgénico. Por lo tanto, sería preciso un dispositivo de trazabilidad completo para asegurarse de no consumir ningún alimento transgénico.

Esta trazabilidad, nosotros la hemos puesto en marcha. En ABS garantizamos que ningún animal ha consumido forraje o harinas con base de OGM. Validamos esta trazabilidad mediante certificados. Los animales cuya producción utilizamos se han beneficiado de una alimentación garantizada sana y natural, para producir la leche de la mejor calidad posible.

BPA (BISFENOL A): DESPUÉS DEL PROCESO DEL CONTENIDO, PASEMOS AL DEL CONTINENTE

Desde hace poco, el bisfenol A (BPA) hace que se hable de él y entra en la arena de los productos peligrosos para la salud. Se trata de un tipo de plástico utilizado muy comúnmente para los embalajes alimentarios e incluso para las tetinas de los biberones. Sin embargo, este plástico es un perturbador hormonal que presenta grandes peligros para la salud y, especialmente, para la reproducción sexual. A continuación indicamos un documento publicado en Wikipedia, que expone de manera clara el riesgo sanitario en el que se incurre con el BPA: http://es.wikipedia.org/wiki/Bisfenol_A.

Gracias a este artículo, sabrá que el 95% de las muestras de orina recogidas a adultos americanos contenían cantidades nada despreciables de BPA. Esta sustancia se acumula en los tejidos grasos. La contaminación se efectúa esencialmente por ingestión, pero nos podemos contaminar también por vías respiratorias o cutáneas. Por lo tanto, todos estamos potencialmente expuestos al riesgo sanitario del Bisfenol A.

Asimismo, ABS garantiza mediante un certificado del proveedor que las bolsas utilizadas para embalar las proteínas se fabrican sin Bisfenol A.

¿CÓMO ESTAR PREVENIDO? COMPARAR, ES GANAR

Cada día se revelan al gran público nuevos escándalos sanitarios. En la actualidad, la pelota está en el campo de los fabricantes que deben asumir sus responsabilidades y anticiparse a los problemas futuros. Para ello, la mejor protección consiste en escoger ingredientes con la máxima responsabilidad. En ABS, esta responsabilidad es nuestra prioridad. Es una evidencia para nuestros equipos de fabricación. Practicamos la tolerancia cero con cualquier ingrediente o procedimiento que presente el más pequeño riesgo para la salud de nuestros consumidores. Es por ello por lo que ABS ofrece los productos más eficaces y los más seguros en el campo de la nutrición deportiva.

¿Cómo preservarse? ¿Cómo protegerse de las eventuales derivas de los fabricantes? Existe un único medio: lea las etiquetas, compare los productos. Una lista demasiado larga de ingredientes siempre será un signo de alerta para que desconfie.

Compare y no dude en informarse. En ABS estamos a su escucha y estamos siempre dispuestos a completar su información. Puede solicitar la opinión de nuestros especialistas que responderán a sus solicitudes de información a la mayor brevedad posible.

PERO DE HECHO : ¿POR QUÉ TOMAR PROTEÍNAS?

Hemos visto que las proteínas designan elementos nutritivos que no tienen nada de peligrosos ni de misteriosos. Recordemos ahora su utilidad. ¿Por qué todos aquellos que desean mejorar su apariencia física, su apariencia y su forma procuran tener una aportación en proteínas suficiente en su alimentación? Sencillamente porque el entrenamiento deportivo regular no basta. También es preciso que sea asociado a una alimentación adaptada. La musculación y el deporte van a estimular los constituyentes del músculo, pero los músculos se desarrollarán en buenas condiciones y los tejidos adiposos desaparecerán gracias a un régimen alimenticio adaptado. Desarrollar sus músculos aumentando también su masa adiposa no permitiría alcanzar el efecto buscado: a saber, un cuerpo esculpido, una forma resplandeciente y una silueta soberbia.

Una única estrategia para tener éxito: entrenarse con regularidad y seguir un régimen alimenticio adecuado. La alimentación adaptada es una alimentación equilibrada que permite también optimizar la aportación en proteínas respetando una dosificación justa de las aportaciones de grasas y azúcares.

Vegetales, animales o derivados animales como el queso, la leche o los huevos, las proteínas son un elemento esencial de esta alimentación estudiada para el desarrollo muscular. Las proteínas vegetales al ser entregadas en cantidades menos grandes que las proteínas animales, será necesario comer más para beneficiarse de los mismos efectos positivos sobre el cuerpo.

Cuando son de origen animal, las proteínas se presentan en concentraciones superiores. A pesar de todo, comer todos los días carne, incluida la carne magra, o pescado, ¿es la mejor solución? Ciertamente no, y esto por varias razones:

En primer lugar, el consumo excesivo de carne es a menudo la primera causa de mortalidad en los países desarrollados. Es un factor de la enfermedad cardiovascular que afecta también a la tasa de colesterol en la sangre, cuyos depósitos grasos acaban por taponar las arterias como hace la cal en un grifo. Por otro lado, el consumo de carne en cantidades demasiado grandes plantea también problemas de orden ecológico con respecto al control de nuestros recursos alimentarios*.

Así, para producir 1 kg de carne, es preciso, como media, 16.000 m3 de agua, mientras que un litro de leche sólo requiere 738 m3, una cantidad también inferior a las necesidades del cultivo de trigo o de maíz. Sin hablar de todos los problemas planteados por el cultivo intensivo. Por consiguiente, es mucho más juicioso consumir proteínas del suero de leche, tanto en el plano de la salud como en el plano del medioambiente.

En conclusión, quedémonos con que las proteínas son una aportación indispensable a aquel que desea desarrollar su musculatura y optimizar su rendimiento deportivo. Para alcanzar sus objetivos, la mejor ración proteínica es una aportación de proteínas surgidas del suero. ¿Por qué es así? Porque la proteína del suero le permite alcanzar sus objetivos deportivos, dándole al mismo tiempo la posibilidad de cuidad su silueta, su salud y su planeta.

* Para saber más sobre el impacto medioambiental del consumo excesivo de carne bovina, consultar este artículo en Wikipedia:
http://en.wikipedia.org/wiki/Environmental_impact_of_meat_production